Un grupo de investigación del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas (IBMCP), centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), ha desarrollado un innovador método para la biofortificación de hojas y otros tejidos verdes de plantas incrementando su contenido en sustancias saludables como el betacaroteno, principal precursor de la vitamina A en la dieta humana.
El trabajo demuestra que, mediante técnicas biotecnológicas y tratamientos con alta intensidad de luz, se puede multiplicar hasta 30 veces los niveles de beta-caroteno en hojas creando nuevos lugares para almacenarlo, sin que esto afecte a procesos vitales como la fotosíntesis. Los resultados se publican en la revista Plant Journal.
- La acumulación masiva de beta-caroteno aporta además una característica coloración dorada a las hojas de lechuga
- El betacaroteno, principal precursor de la vitamina A en la dieta humana, tiene propiedades antioxidantes y inmunoestimulantes
- La tecnología puede aplicarse sin afectar a otros procesos vitales de las plantas como la fotosíntesis
Si bien las superlechugas doradas representan un avance en biofortificación, depender de la biotecnología para mejorar la nutrición puede restar importancia a la necesidad de promover una alimentación diversa y sostenible.