Entre los primeros documentos historicos que describen en detail la cocina romana es la obra De re coquinaria del autor Marcus Gavius Apicius, que vivía en el primer siglo a.C.
Con los avances en el poder, en el comercio y, sobre todo, con las avances en la agricultura, la cocina de Roma volvió más y más compleja, especialmente en la clase alta.
Igualmente, fruto de esa progresiva especialización, fue el perfeccionamiento de las técnicas de conservación para prolongar la duración de los alimentos. Como por ejemplo: salar, conservar en vinagre, conservar en aceite de oliva, conservar por fermentación alcohólica ó láctea, salmuera, cocer en vino, secado al aire, sumergir en agua hirviendo, conservar en miel, elaborar embutidos, envasar etc.
Con la conquista de nuevos territorios también hubo un incremento en nuevos especies, nuevas recetas y nuevas técnicas de cocinar y conservar. Los alimentos mas importantes en la Antigua Roma eran el Triticum (trigo) y la cerveza, cual era la bebida más común para la sociedad excepto por la clase alta (que tomaba normalmente el vino tinto). Muy importante era la Frumenta, que era el abastecimiento de productos de trigo (sobre todo el pan). Si la Frumenta no era suficiente, la ciudad de Roma era en riesgo de revoltes e inestabilidad.
La alimentación romana consistió generalmente en tres comidas al día:
Ientaculum: era el desayuno (7-8 h) que consistía básicamente en pan untado en ajo, sal o algún otro condimento. En algunas casas se consumían también huevos, queso, leche, miel, frutos secos, uvas u otra clase de frutas, vino aromatizado…
Prandium: se trataba de una comida suave, en la que se ingería verduras, frutas y quizás carne (las clases bajas no la hacían) o las sobras de la cena anterior, frías/recalentadas.
Cenae (14-15 h) era la comida más fuerte e importante .En los primeros tiempos de la República, la cena era bastante simple: se tomaba el pulmentum (papilla de harina de trigo), complementado con otros alimentos procedentes del campo. Solamente en los días festivos se comía carne de los animales sacrificados a los dioses.
A partir del siglo II a.C., la cena consistió en cuatro partes:
Gustati (entrantes): era un plato con productos destinados a abrir el apetito de los invitados. Destacaban: huevos, aceitunas, champiñones, ostras, lechuga, pescados en salmuera…
Prima mensa: era la parte fuerte de la cena y estaba compuesto de varias partes (según Marcial podía elevarse hasta tres). Destacaron sobre todo el cabrito cebado, los espárragos silvestres, el cerdo, las crestas de gallo…
Secunda mensa (postre): en este plato se tomaba todo tipo de repostería suave o queso, frutas, frutos secos…
Comissatio (fiesta): era el momento que se aprovechaba para conversar, ver teatro, mimos o bailarinas.
Fuentes: La alimentación en la Antigua Roma – Revista de Historia
Almagro Gorbea, M.J., La alimentación en la antigua Baria en la época romana y prerromana, Gerión, nº3,1991, pp 119-118
Cabrero,J y Cordente, F., Roma: el imperio que generó por igual genios y locos, Edimat Libros, Madrid, 2008.
Me ha gustado saber más sobre lo que comían nuestros antepasados, ver que también tenían comidas que hacían diariamente como nosotros actualmente y que cada cultura las ha ido adaptando a como creen que es lo correcto.
Es muy curioso saber la gran diferencia que había en la antigua roma respecto a ahora a la hora de alimentarse. De la misma manera es interesante saber que durante el transcurso de la cena, el comissatio, se parece al momento de sobremesa que hacemos ahora.
Es una noticia interesante y muy cultural. Se explica como ya en la Antigua Roma tenían una dieta diversa y balanceada, influenciada por las distintas tradiciones locales, algo que hemos aprendido de ellos y adaptado a la actualidad.
La alimentación en la antigua Roma me ha resultado muy interesante, ya que refleja tanto la riqueza de su cultura como sus diferencias sociales. También, es algo que desconocía por completo y creo que es algo que nos puede llegar a impactar mucho, el cómo ha cambiado realmente la alimentación en la sociedad humana.