¿Cómo nuestra alimentación afecta al medioambiente?
Los cambios en el ecosistema se hacen sentir cada vez más en nuestro día a día y eso incluye a lo que comemos. El sector de los alimentos es uno de los que más contamina al planeta en la actualidad, pues genera modificaciones en el suelo y, en algunos casos, hasta produce gases tóxicos que también atentan con el hábitat de seres humanos, animales y especies de todo tipo.
Para cuidar nuestra biodiversidad es preciso tomar consciencia de la comida que ingerimos, ya sea carne o verdura. Por eso, a continuación te explicaremos cuál es el impacto de la industria alimentaria en el medio ambiente, y te daremos una serie de tips para llevar una alimentación más sana, con los mismos nutrientes y menos contaminante.
¿Por qué es importante tener en cuenta el impacto de nuestra alimentación en el medio ambiente?
Cuando se piensa en el impacto ambiental del hombre no siempre se tiene en cuenta a la industria de los alimentos. Sin embargo, la producción de ciertos comestibles pueden llegar a ser realmente dañinos por las siguientes razones:
- La producción de proteínas de origen animal provocan más emisiones de gases de efecto invernadero que otras industrias, que con el tiempo provocan sequías o precipitaciones inusitadas.
- Otro gran problema es el desperdicio de alimentos, que en general sucede porque esa comida no se corresponde con lo esperado por el consumidor y se desecha. De esta manera, se pierden recursos naturales y se agravan las consecuencias del cambio climático.
En concreto, es fundamental prestar atención al impacto de la industria alimentaria en el medio ambiente porque repercute inmediatamente en el estado del ecosistema, y el tiempo se está agotando.
¿Cómo impacta la producción de alimentos en el medio ambiente?
A través de prácticas dañinas, el planeta continúa viéndose afectado por el cambio climático y la emisión de gases del efecto invernadero. Pero si bien la producción de alimentos genera esto, también es cierto que debe existir una forma de mitigar estas consecuencias.
Para ello, primero, es importante entender de qué manera y en qué medida se destruye el ambiente con la producción de alimentos, según la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Disminución de los recursos naturales de agua
El impacto de la industria alimenticia en el medio ambiente se ha hecho notar en los ecosistemas acuáticos en los últimos años, provocando la desaparición paulatina de la biodiversidad. De hecho, uno de los principales elementos contaminantes del agua es el plástico, que proviene de desechos humanos, empaques de alimentos, y hasta partes de las redes de pesca. En este sentido, se recomienda comer de forma más natural y elegir alimentos poco procesados.
Degradación de la flora
El impacto de la industria alimentaria en el medio ambiente también se ve en la flora presente en diferentes sitios del mundo. A este ritmo, en diversas regiones se producirá una desertificación, lo que significa que el suelo desértico no será apto para producir ni sembrar ningún tipo de alimentos.
Producción de gases tóxicos
El impacto ambiental de la agricultura es equivalente al de la ganadería, que, como mencionamos, contribuye a la contaminación atmosférica producto de gases como el dióxido de carbono, el óxido nitroso y el metano.
Contaminación acústica
Las emisiones de gases del efecto invernadero también son producto del transporte de alimentos, pero no es lo único que atenta contra el medio ambiente en lo que refiere a esta actividad. Los camiones, trenes y barcos que transportan alimentos incrementan la contaminación sonora, proliferación de residuos y desechos tóxicos.
Deforestación
La pérdida de bosques y selvas se suma al impacto ambiental del hombre al realizar actividades como la ganadería. Esto sucede porque el suelo es utilizado para la producción de alimentos y, por tal motivo, las empresas pasan a hacer uso de pesticidas y fertilizantes.
¿Qué alternativas existen para minimizar este impacto?
Como habrás visto, la lista de cómo afecta el consumismo al medio ambiente es vasta y preocupante. Sin embargo, existen una serie de soluciones que se pueden seguir para que el efecto de estas actividades alimenticias en el ecosistema sea menor. Es importante tomar consciencia, apostar por lo natural y elegir energías renovables. Toma nota de los siguientes cambios que puedes hacer en tu rutina para beneficiar al ambiente:
Comprar alimentos a granel
En este punto nos referimos a comprar alimentos al natural y por peso, sin necesidad de que sean empaquetados. Por un lado, tu alimentación mejorará ya que obtendrás como resultado una comida menos procesada e industrializada. Por el otro, evitarás el uso de plástico, uno de los elementos más contaminantes del planeta y contra el cual se necesita una acción urgente.
Reciclar y reutilizar
No en todos los alimentos puedes evitar la compra de empaquetados. En esos casos, intenta reutilizar los envases para otros propósitos. Los envases de yogurt, por ejemplo, pueden ser excelentes macetas para tus plantas. ¡Anímate a innovar! El objetivo es darle un nuevo uso y hacerlo circular.
Evitar el desperdicio de comida
Este paso es fundamental porque es también una de las consecuencias de la producción de alimentos que más genera contaminación en el medio ambiente. Para evitar el desperdicio de comida, hay que hacer una planificación de lo que se va a comer cada día o semana. Evita comprar de más, lo que te ahorrará tiempo y dinero. Por otro lado, si te quedaron sobras, intenta reutilizarlas en otra comida.
¿Cómo nuestra alimentación afecta al medio ambiente? | Aprende Institute
Historia de los alimentos: ¿por qué comemos lo que comemos?
Alguna vez has pensado ¿por qué comemos lo que comemos? o ¿de dónde vienen los alimentos que llegan a la mesa? Usualmente vemos la alimentación como una necesidad o un placer, pero la forma de alimentarnos ha tenido grandes impactos en nuestro camino como especie y ha modificado considerablemente nuestro planeta. Definitivamente, “somos lo que comemos”.
En el mundo, las formas de producción de alimentos han llevado a que cada vez tengamos dietas más homogéneas, es decir, tendemos a comer muy parecido. Si millones de personas comemos lo mismo todos los días, se necesitarán miles de hectáreas, de unos pocos cultivos, para satisfacer esa demanda, lo cual desgasta los suelos y afecta los ecosistemas.
En este panorama, se estima que se ha perdido hasta un 75% de la diversidad genética de los cultivos alimenticios. Y aunque en la historia de la humanidad miles de especies han sido utilizadas para consumo humano, hoy solo 120 especies de plantas se cultivan en grandes proporciones en el planeta y las tres cuartas partes del suministro mundial de alimentos proviene apenas de 12 plantas y cinco animales.
De cara a esta realidad quisimos crear, junto a la reconocida historiadora colombiana Diana Uribe, una serie podcast sobre la historia de los alimentos. ¡Es momento de cambiar el chip! Si somos más conscientes de los impactos de nuestra alimentación podemos fomentar la agrobiodiversidad, enriquecer nuestra dieta y reducir las presiones sobre la naturaleza.
¿Cómo puedes ser parte de la solución?
A través de acciones sencillas, es posible llevar una alimentación saludable para el planeta:
– Consume más vegetales y frutas. Los expertos recomiendan llenar más de la mitad del plato con productos de origen vegetal.
– Compra local y nacional; también, productos de temporada. Transportar los alimentos genera gases de efecto invernadero, por eso, entre menos distancias recorran hasta nuestros platos su huella de carbono será menor.
– Aprovecha la variedad y no comas siempre lo mismo. Si comemos variado, fomentamos la agrobiodiversidad.
– Respeta las temporadas de veda y apoya la pesca sostenible. Si compras en temporadas del año en las que se prohíbe la pesca de ciertas especies de peces o mariscos, incentivas su captura ilegal.
– Compra solo lo que vayas a consumir y evita los empaques. Antes de hacer compras, haz una lista de lo que necesitas, así no desperdicias. Lleva, también, tu bolsa reutilizable.
Fuente. WWF
La actividad física y una adecuada alimentación siempre mejoran algo en cualquier enfermedad.
Los doctores Gerardo Rodríguez y José Antonio Casajús lo expondrán bajo el título ‘Somos lo que comemos y cómo nos movemos: ejercicio y alimentación, bases de una vida saludable’ en el patio de la Infanta de Ibercaja.
Realizar actividad física y tener una alimentación adecuada siempre contribuyen a mejorar algo en cualquier enfermedad. Así lo expondrán el asesor científico de Pediatría del Hospital Viamed Montecanal y profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza, Gerardo Rodríguez, y el catedrático de Actividad Física y Salud de la Universidad de Zaragoza y especialista en Medicina del Deporte, José Antonio Casajús, en el ciclo ‘Aulas de Salud’.
Esta actividad está organiza por el Hospital Viamed Montecanal en colaboración con Ibercaja, Universidad de San Jorge (USJ) y Grupo Piquer. La sesión de Rodríguez y Casajús tendrá lugar este miércoles a las 19.30, en el patio de la Infanta de Ibercaja en Zaragoza, con entrada libre hasta completar aforo.
En ella, se explicará cómo unos hábitos saludables de ejercicio y alimentación protegen de algunas de las causas evitables de enfermedad y muerte más habituales, como la enfermedad cardiovascular, la obesidad y sus complicaciones, una mala salud ósea, o incluso patologías como ciertos tipos de cáncer y enfermedades pulmonares.
«Cada uno de nosotros tenemos predisposición a padecer ciertas enfermedades, si bien la dieta y el ejercicio permiten atenuar esta tendencia e, incluso, impedir su aparición», han afirmado ambos especialistas.
Bajo el título ‘Somos lo que comemos y cómo nos movemos: ejercicio y alimentación, bases de una vida saludable’, los doctores Gerardo Rodríguez y José Antonio Casajús indicarán que combinar un buen nivel de ejercicio físico, evitar el sedentarismo y conseguir una ingesta alimenticia adecuada en cada etapa de la vida «es la mejor píldora para nuestra salud y calidad de vida ya que, administrada a diario, nos permite vivir más y mejor», han asegurado ambos especialistas.
La acción combinada de dieta y ejercicio ha demostrado ser un tratamiento eficaz para mejorar la calidad de vida, no solo de niños o adultos sanos, sino también de quienes padecen alguna enfermedad ayudando a una mejor evolución de la misma, han subrayado.
Una correcta alimentación y el ejercicio pueden mejorar la condición física del paciente y la evolución de las enfermedades en función de la patología. «Son indiscutibles, por ejemplo, su beneficios en niños con obesidad, fibrosis quística, cáncer o discapacidad física. En algunos de estos pacientes la posibilidad de ingreso se reduce hasta en un 10% y en niños con leucemia linfoblástica aguda, la incorporación del ejercicio físico a la terapia puede mejorar su condición física entre un 15-20%», ha dicho Gerardo Rodríguez.
En adultos con enfermedad crónica, la prescripción de ejercicio físico adaptado a sus posibilidades mejora el pronóstico y la recuperación y, por supuesto, su calidad de vida. «Siempre hay algo que mejorar en cada enfermedad gracias a la actividad física y la alimentación», han afirmado ambos especialistas
FUENTE: Europa Press, La actividad física y una adecuada alimentación siempre mejoran algo en cualquier enfermedad | Noticias de Salud en Heraldo.es
El efecto de beber café después de las comidas en el cuerpo.
Aunque la base científica recoge tanto beneficios como riesgos, es importante conocer qué impacto tiene en nuestras patologías el consumo de café después de las comidas.
Hay quien no puede vivir sin su café a primera hora de la mañana, sin embargo, otros prefieren beberlo justo después de la comida. Esta bebida estimulante es una de las más populares en España, por eso no es raro ver a restaurantes ofrecer una taza después de las comidas. En este contexto, nacen algunos interrogantes sobre el efecto que puede llegar a tener en la digestión. Lo cierto es que puede tener tanto beneficios como inconvenientes, por eso su influencia en el organismo es toda una dicotomía que los expertos han querido estudiar a lo largo de los años.
Una de las creencias más extendidas es que el café es un digestivo que ayuda al tránsito intestinal. Eso tiene como base científica el hecho de que el café estimula la producción de ácido gástrico y la motilidad del tracto digestivo, lo que podría acelerar la digestión. No obstante, esto también puede tener una gran desventaja en personas que tiene problemas como reflujo gastroesofágico o gastritis, ya que el exceso de ácido gástrico puede agravar sus síntomas.
El efecto del café en la absorción de nutrientes.
Uno de los aspectos que recogen los estudios acerca de beber café después de la comida es el impacto que tiene en la absorción de nutrientes. Sobre todo, la preocupación se debe a la inhibición de dos minerales esenciales para el organismo, como son el calcio y el hierro.
Tomar café después de una comida rica en carnes rojas, legumbres o vegetales que aportan hierro no hemo, es casi como no ingerirlos. Esto tiene como consecuencia que personas que sufren de anemia o niveles bajos de hierro puedan no estar adquiriendo los nutrientes necesarios. Es por ello que los expertos recomiendan esperar al menos un hora para beber el café después de comer.
En el caso del calcio, su disminución no tiene tanto que ver con la absorción sino más bien con la eliminación. Tomar café después de comidas ricas en este mineral hará que el café interfiera mínimamente con la absorción en el intestino, pero sí que aumenta los niveles de calcio que eliminan los riñones. Esto provoca que a niveles general se vea disminuido en el organismo.
Su impacto en el metabolismo y el mito del peso.
El café es conocido por su capacidad para estimular el sistema nervioso central, aumentando los niveles de alerta y energía. Es esta necesidad de estimulación y productividad después de la somnolencia que provoca las comidas las que nos hace ingerirlo. Sin embargo, no a todos nos afecta por igual.
Mientras algunas personas experimentan un aumento en su capacidad para concentrarse y mantenerse activas, otras pueden sentir nerviosismo o ansiedad. Los experto recomienda, por tanto, un consumo moderado e incluso evitarlo si eres sensible a la cafeína.
Por otra parte, existe la teoría de que el café ayuda a bajar de peso si lo tomas después de las comidas. Aunque su contenido de cafeína puede aumentar el metabolismo y la quema de calorías, la pérdida de peso es mínima. Un mito que termina de desmoronarse en cuanto al café se le añaden azúcares o edulcorantes.
FUENTE: 20 minutos, El efecto de beber café después de las comidas en el cuerpo
El futuro de la alimentación: ¿cómo nos alimentaremos en 2050?
La alimentación es un aspecto fundamental de nuestras vidas, su evolución está ligada a cambios en la sociedad, tecnología y medio ambiente.
Ante los efectos inminentes del cambio climático, la comunidad científica ya se encuentra trabajando para adaptar la dieta actual a una posible crisis alimentaria en el futuro. La invasión rusa en Ucrania puso en evidencia la problemática de depender de unos pocos cultivos comercializados en todo el mundo. Es por esto que para poder garantizar el futuro de la alimentación es necesario hacer un cambio radical en la manera de producir.
Se estima que la demanda de alimentos se incremente en un 50 por ciento para 2050 y que el mayor desafío ante este escenario sea conseguir un cambio profundo en el estilo de vida y en los sistemas de producción.
La alimentación en el 2050: ¿cómo serán los nuevos hábitos alimenticios?
En el 2050 la Tierra estará poblada por casi 10.000 millones de habitantes, lo que se traduce en un grande desafío para la industria alimentaria. Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), existe evidencia preocupante de que la biodiversidad que sustenta el sistema alimenticio actual está desapareciendo, lo que pone en peligro el futuro de los alimentos.
Ante la amenaza de inseguridad alimentaria en los próximos años es importante implementar cambios en los hábitos alimenticios que permitan reducir los desperdicios alimentarios al mínimo. Una buena opción es comprar los productos a granel o bien optar por alimentos ecológicos para sólo consumir lo necesario.
Otra tendencia que puede marcar la diferencia según los expertos es la dieta veggie, es decir, más vegetales y menos carne y pescados. Pero, para que esto sea posible los sistemas de producción deben migrar a una agricultura más ecológica e incorporar las foodtech. De esta manera, la alimentación, la sostenibilidad e innovación irían de la mano.
La agricultura ecológica, que consiste en evitar el uso de productos químicos y aplicar prácticas amigables con el ecosistema para obtener alimentos nutritivos y saludables, es una de las soluciones planteadas por los expertos. En el 2019, las tierras agrícolas dedicadas a la producción ecológica aumentaron 1,1 millones de hectáreas en todo el mundo, lo que indica que es una tendencia que va en crecimiento.
Las empresas foodtech, por otro lado, aprovechan las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, la robótica o la biotecnología para modernizar y cambiar por completo la industria alimentaria, de tal modo que sea más eficiente y sostenible. Uno de los hitos más famosos es el filete de carne de laboratorio que fue creado a partir de células madre de vaca en 2018.
¿Cuáles serán los alimentos del futuro?
Según Sam Pirinon, investigador de Kew Gardens, la clave para mermar la pérdida de biodiversidad, garantizar el abastecimiento de los alimentos y adaptar la industria alimentaria a los efectos del cambio climático, es diversificar los alimentos que se consumen.
En la actualidad, se tiene certeza de la existencia de miles de especies de plantas comestibles que son consumidas por distintas poblaciones y es precisamente en esta variedad que se pueden hallar algunas de las soluciones a los problemas que hay hacer frente en el futuro.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) publicó recientemente un informe en que se agrupaban en 11 categorías los alimentos que, según sus proyecciones, serán los alimentos del futuro.
- Algas: laver y wakame.
- Legumbres: haba, lenteja, adzuki (o soja roja), mung (o soja verde), vigna subterránea, vigna unguiculata, frijol marama, frijol negro y frijol de soja.
- Cactus: nopal.
- Cereales y granos: quinoa, arroz integral, trigo sarraceno, trigo khorasan, trigo espelta, mijo africano, mijo fonio, amaranto y teff.
- Frutas y verduras: flor de calabaza, okra y tomate naranja.
- Hortalizas: remolacha, grelo, kale, moringa, pak-choi, calabaza, col morada, espinaca y berro.
- Setas: enoki, maitake y níscalo.
- Semillas: linaza, cáñamo, ajonjolí y junglans.
- Raíces: raíz de perejil, salsifí negro y rábano blanco.
- Brotes: alfalfa, habas germinadas y garbanzos germinados.
- Tubérculos: raíz de loto, ube, jícama y camote.
A la lista anterior, la FAO también añade un grupo insectos que aportan proteína de alta calidad, fibra y ácidos grasos y que ya consumidos en muchos países de Latinoamérica y Asia.
Proteínas alternativas
A medida que la preocupación por el cambio climático y el bienestar animal crece, las proteínas alternativas ganarán protagonismo. Las fuentes de proteínas a base de plantas, insectos y carne cultivada en laboratorio se convertirán en opciones comunes en nuestras mesas. Esto no solo reducirá nuestra huella de carbono, sino que también ofrecerá una variedad de sabores y texturas que enriquecerán nuestra dieta.
Tecnología culinaria
La tecnología también transformará la forma en que cocinamos y consumimos alimentos. La impresión 3D de alimentos permitirá crear platos personalizados, adaptados a las necesidades nutricionales de cada individuo. Además, las aplicaciones de inteligencia artificial ayudarán a planificar dietas equilibradas y a evitar el desperdicio de alimentos, sugiriendo recetas basadas en los ingredientes que tengamos en casa.
Alimentos funcionales y personalizados
La nutrición personalizada se convertirá en la norma. A través del análisis genético y biométrico, podremos identificar las necesidades nutricionales específicas de cada persona. Los alimentos funcionales, enriquecidos con probióticos, vitaminas y minerales, se diseñarán para mejorar la salud y prevenir enfermedades.
La idea de que «somos lo que comemos» tomará un nuevo significado.
FUENTE: OkDiario, El futuro de la alimentación: ¿cómo nos alimentaremos en 2050?
OCU analiza los comedores escolares y el resultado es preocupante: Consejos para mejorar la alimentación infantil
Según sus estudios de menús escolares, no se cumplen las recomendaciones de alimentación, sino que se abusa de hidratos y precocinados, mientras que se toma menos verdura, legumbres y fruta.
La vuelta al cole supone, para muchos niños, el regreso a los comedores escolares. Un hecho que puede suponer, en algunos casos, una mala alimentación. Un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios apoyado en el Ministerio de Consumo, analizó, el pasado año, 622 menús escolares diferentes enviados por familias de toda España. Es más, ninguno de los menús analizados cumplía las recomendaciones consensuadas por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), el Ministerio de Educación y las consejerías de Sanidad y Educación.
OCU saca tres claras conclusiones:
– En general, los resultados del estudio de menús escolares estaban lejos de cumplir las recomendaciones sobre alimentación infantil.
– El precio del comedor, uno de los más importantes de todo el curso, depende sobre todo del tipo de colegio, pero no afecta a la calidad: los menús mejores y más completos no eran los más caros.
– Solo 1 de cada 3 menús se cocina directamente en el centro, mientras que más de la mitad recurren a servicios de catering, sobre todo línea fría: son menús elaborados por empresas externas y que llegan al centro para ser calentadas. Estos son los que pores resultados arrojan, mientras que en conjunto los fallos son menos en los casos en que se cocina directamente en el mismo centro.
«El exceso más habitual son los platos a base de hidratos de carbono, como el arroz, la pasta o las patatas, por el desequilibrio que genera frente a otros alimentos básicos, como las legumbres, que deberían estar presentes en el menú al menos 1,5 veces a la semana (6 veces al mes)», apuntan.
«Otro alimento demasiado presente son los precocinados, como las croquetas o las empanadillas, bien recibidos por los escolares, pero con una calidad nutricional baja y que sustituye a otros alimentos proteicos más interesantes, como los huevos o el pescado azul. Los niños deberían tomar huevos al menos una vez a la semana; los precocinados, como máximo, una vez cada 15 días», explican desde OCU.
Aunque las medias de consumo de verduras son adecuadas, casi siempre se elaboran en forma de puré (46%) o de ensaladas (43%). Habría que ofrecer más verdura entera, a ser posible de temporada, apuntan los expertos.
La carne, junto al pescado y los huevos, constituyen la fuente proteica de la dieta de los escolares. La carne debe estar presente una o dos veces por semana, limitando el embutido (salchichas, chorizo, etc.) por su excesiva grasa y sal.
En cuanto al pescado, lo ideal es alternar el blanco y azul a partes iguales (el azul supone solo el 22%), con preferencia por los pescados de pequeño tamaño que no presentan problemas de mercurio.
En el postre debería haber siempre o casi siempre fruta fresca y procurando variar, no solo manzana, pera o plátano, que es lo habitual. Los yogures y postres azucarados no más de una vez a la semana.
Los peores resultados, cuando se cocina fuera del centro
No se observan diferencias de calidad en los menús según el tipo de centro o el coste del menú, que varía entre los 96 €/mes de los públicos y los 146 €/mes de los privados. Pero sí en función de dónde se cocinan: hasta un 55% de los menús son muy desequilibrados cuando llegan, ya preparados y calientes, desde una empresa externa, la llamada línea caliente. Cuando el envío se realiza en frío, los resultados no son mucho mejores: el 46% de los menús tampoco cumplen las recomendaciones para la mitad de los ocho grupos de alimentos principales. Los resultados menos malos se dan cuando hay una cocina en el centro escolar: ‘solo’ el 39% de los menús son muy desequilibrados.
En un país con un 40% de niños y niñas con sobrepeso, urge aprobar el Real Decreto de Alimentación Escolar, consensuado desde 2010 por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, el Ministerio de Educación y las consejerías de Sanidad y Educación. Modificando, eso sí, algunos aspectos: como el traslado de las patatas desde el grupo de verduras al grupo de hidratos de carbono o la inclusión obligatoria de pescado azul. Del mismo modo, OCU insta a las Consejerías de Educación de las Comunidades Autónomas a impulsar las cocinas dentro de los centros escolares.
No obstante, OCU recuerda la importancia de seguir unos hábitos de vida saludables, también a través de la práctica del deporte. La OMS advierte que el 81% de los niños y adolescente no realiza al menos 60 minutos de actividad física, lo que aumenta el riesgo de sufrir diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares.
El CTNC, presente en el 22º Congreso Internacional de Ciencia y Tecnología de los Alimentos
El Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTNC) participa en el Comité Científico del 22º Congreso Internacional de Ciencia y Tecnología de los Alimentos que se celebra del 8 al 12 de septiembre en Rimini (Italia). Un evento de gran relevancia en el ámbito mundial, organizado por la prestigiosa Unión Internacional de Ciencia y Tecnología de los Alimentos (IUFOST). El congreso, que se desarrollará durante los próximos días, está presidido por el Dr. Sebastiano Porreta, un reconocido experto en el campo de la ciencia de los alimentos.
La participación activa de distintos responsables del CTNC en este Congreso subraya el compromiso del centro investigador con la innovación y el avance en la industria alimentaria. Cabe señalar que este comité juega un papel crucial en la orientación de las discusiones científicas y tecnológicas que se llevarán a cabo durante el congreso.
Tanto el responsable de la OTRI, Ángel Martínez, como el de la Planta Piloto, David Quintín, participan en diversas actividades y sesiones del congreso, en el marco de los proyectos que desarrolla junto con el Instituto de Fomento de la Región de Murcia (Info). Entre los proyectos presentados se encuentran ET1Aplauso, que se centra en la innovación en técnicas de conservación; ET2Fresacaps, orientado a la encapsulación de compuestos bioactivos para la industria alimentaria; y el proyecto denominado Digisost que aborda la digitalización y sostenibilidad en la cadena alimentaria.
Cabe señalar la alta capacitación con la que cuentan los técnicos del CTNC en las últimas tendencias y tecnologías del sector alimentario y de la conservación que mejoran la seguridad y la calidad de los productos alimentarios ofreciendo soluciones eficaces y sostenibles a las empresas asociadas y a clientes y permitiéndoles enfrentarse a los desafíos del mercado garantizando el liderazgo en un entorno muy competitivo.
Sobre el Congreso
El congreso, que reúne a destacados científicos, investigadores y profesionales de la industria alimentaria de todo el mundo, ofrece una plataforma única para el intercambio de conocimientos, el debate sobre los desafíos actuales y futuros de la industria y la promoción de colaboraciones internacionales. La participación del CTNC en este evento no solo refuerza su posición como líder en investigación y tecnología de los alimentos, sino que también destaca el papel clave de la Región de Murcia en el panorama global de la industria alimentaria.
Fuente: España lidera en solitario el paro entre los países de la OCDE (murciadiario.com)
¿TOMAR TÉ CADA DÍA? ANALIZAMOS CUANTOS TÉS SE PUEDEN TOMAR AL DÍA
- agosto 8, 2023
En este post hablaremos sobre una pregunta que nos llega muy muy a menudo en nuestras redes sociales ¿Cuántos tés se pueden tomar al día? ¿Cuántos tés se pueden tomar al día? ¿Qué pasa si tomo té cada día?
Muchos y muchas de los que leéis este post o de los que compráis té en TESUKO tomáis tés cada mañan, seguro que a lo largo del día si tenemos oportunidad y por la tarde, pero ¿es realmente beneficioso para nuestra salud? Vamos a hablar de ello y descubrirlo.
El té es una bebida milenaria que se consume en todo el mundo y que ofrece una amplia variedad de sabores y beneficios para la salud. En este artículo, exploraremos cuántos tés se pueden tomar al día y nos centraremos en los beneficios del té verde, una de las opciones más populares. Acompáñanos en este recorrido por el fascinante mundo del té.
Eso sí, antes de comenzar a hablar más en detalle, dejemos claro que no todos los tés son iguales. De la misma manera que existen un sin fin de aromas y sabores, también existen diferentes niveles de cafeína o teína. Una cosa que podríamos empezar a plantear es ¿sabes el nivel de cafeína que tiene cada té que tomas? Te damos algunas pistas en nuestro post TEÍNA vs CAFEÍNA.
¿CUANTOS TÉS SE PUEDEN TOMAR AL DÍA?
La pregunta que mucha gente nos hace es ¿Cuántos tés se pueden tomar al día?
La respuesta no es fácil, ya que la cantidad de té que puedes tomar al día depende de diferentes factores, pero especialmente dependerá de la sensibilidad a la cafeína y dependerá del tipo de té que tomemos. Sin embargo, de manera general, se recomienda no exceder las 4-5 tazas de té al día para evitar posibles efectos secundarios.
Es importante recordar que el té, especialmente el té, contiene cafeína. Si eres sensible a esta sustancia o tienes problemas para conciliar el sueño, es recomendable limitar tu consumo de té y evitar tomarlo por la noche.
Esta recomendación de 4-5 tés al día, depende del tipo de té que se está tomando ya que, como sabes, no todos los tés tienen la misma cantidad de cafeína: no será lo mismo tomarse 5 matchas que tomarse 5 tés verdes tostados.
BENEFICIOS DEL TÉ
El té es conocido por sus numerosos beneficios para la salud. A continuación, exploraremos algunas de las ventajas más destacadas de tomar té cada día:
1. El té es rico en antioxidantes
El té es una excelente fuente de antioxidantes, especialmente el té verde, como las catequinas.
Tomar té cada día te ayudará a proteger el cuerpo contra los radicales libres y el envejecimiento prematuro. Estos antioxidantes también se han relacionado con la prevención de enfermedades crónicas, como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.
2. El té ayuda en la pérdida de peso
El té ha demostrado ser útil en el proceso de pérdida de peso. Sus componentes activos, como la cafeína y las catequinas, pueden aumentar el metabolismo y ayudar a quemar grasa de manera más eficiente. Además, el té puede actuar como un supresor natural del apetito, lo que puede ayudar a controlar la ingesta de alimentos.
Tomar té cada día nos puede ayudar con nuestros objetivos de control del apetito.
3. El té mejora la salud cerebral
El té contiene compuestos bioactivos que pueden mejorar la función cerebral. La combinación de cafeína y L-teanina, un aminoácido presente en el té verde, puede ayudar a mejorar la atención, el estado de alerta y la memoria.
4. El té fortalece el sistema inmunológico
Los antioxidantes presentes en el té pueden fortalecer el sistema inmunológico y ayudar a combatir enfermedades e infecciones. Además, el té verde también tiene propiedades antibacterianas y antivirales que pueden proteger al organismo de posibles patógenos.
5. El té promueve una buena salud cardiovascular
El consumo regular de té se ha asociado con una disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares, en concreto el té verde, como la enfermedad cardíaca y el accidente cerebrovascular. Esto se debe a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, que ayudan a mantener los vasos sanguíneos sanos y a reducir el colesterol LDL (colesterol malo).
PRECAUCIONES AL TOMAR TÉ
Aunque el té verde tiene muchos beneficios para la salud, es importante tener en cuenta algunas precauciones:
- El té contiene cafeína, por lo que puede causar problemas para conciliar el sueño o aumentar la ansiedad en personas sensibles a esta sustancia. Si experimentas estos efectos, es recomendable reducir tu consumo de té verde o limitarlo a las primeras horas del día.
- Si estás embarazada, es aconsejable consultar a tu médico antes de consumir té verde. Aunque se considera seguro en cantidades moderadas, es mejor asegurarse de que no haya riesgos adicionales para ti y tu bebé.
- Si tienes problemas de salud específicos, como trastornos de la coagulación, problemas cardíacos o hipertensión, es importante hablar con un profesional de la salud antes de incorporar el té verde a tu rutina diaria.
¿ES BUENO TOMAR TÉ CADA DÍA?
Tomar té todos los días puede tener multitud de beneficios para la salud.
El té contiene polifenoles que pueden actuar como antioxidantes y tienen propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Además, puede ser una buena manera de mantenerse hidratado y puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.
TOMAR TÉ VERDE CADA DÍA
El té verde es conocido por sus numerosos beneficios para la salud. Contiene antioxidantes que pueden ayudar a prevenir enfermedades y proteger nuestras células del daño. Además, el té verde puede ayudar a acelerar el metabolismo y promover la pérdida de peso.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que el té verde contiene cafeína. No todos los tés verdes contienen la misma cantidad de cafeína, por ejemplo, el té matcha es el té verde que más cafeína contiene, seguido de los tés gyokuros o muchos té de sombra japoneses.
Por el contrario hay tés como los tés verdes tostado o los banchas de otoño, que sus niveles de cafeína son tan bajos que hasta los bebes japoneses los toman.
Tomar té verde cada día nos ayudará a tener unos niveles de energía elevados y un nivel de antioxidantes increíblemente alto. El té verde, en especial el té matcha, es uno de lo alimentos con mayores niveles de antioxidantes así que, tomar té verde cada día es un aliado seguro para tu salud.
TOMAR TÉ NEGRO CADA DÍA
Por otro lado, tenemos el té negro. A diferencia del té verde, el té negro pasa por un proceso de fermentación, lo que le da un sabor más intenso y sabores menos vegetales.
En el té negro, la identificación de los niveles de cafeína es más compleja, porque depende de su proceso, de su cultivo y cosecha.
A muchas personas el consumo excesivo de té negro les da ansiedad o les produce un nivel de alerta superior que tomando la misma cantidad de té verde. Esto se debe a que, en el té negro, los niveles de L-teanina son inferiores a los del té verde.
Recuerda que la L-teanina es la responsable de regular el efecto de la cafeína en nuestro cuerpo, por lo que, tomando té verde y té negro podremos tomar la misma cantidad de cafeína, pero el efecto en nuestro cuerpo es diferente.
CAFEÍNA vs TEÍNA
Siempre que podemos hablamos de las diferencias entre la cafeína y la teína. Cafeína VS Teína, la gran duda de nuestro siglo.
La teína es un compuesto químico presente en el té, cantidad que varía en función del tipo de té que tomemos. Aún hoy mucha gente cree que la teína es diferente a la cafeína pero en realidad son la misma molécula. La única diferencia es que la teína se encuentra en el té y la cafeína en el café, lo identificamos diferente porque el efecto en el organismo es diferente debido al resto de compuestos que acompañan a ambas bebidas, pero en el fondo, es la misma molécula.
Consejo: si eres sensible a la cafeína, debes tener cuidado con la cantidad de té que consumes diariamente o, saber identificar los tés con menos nivel de teína.
Fuente: Marek[At]promokit.Eu. (s. f.). TESUKO. TESUKO. https://tesuko.com/es/blog/cultura-del-te/tomar-te-cada-dia-analizamos-cuantos-tes-se-pueden-tomar-al-dia
Los mejores alimentos para disminuir las arrugas
8 minutos
Incrementa el consumo de alimentos ricos en vitamina C, como el brócoli, las espinacas o los cítricos, ya que actúan como antiinflamatorio y protegen la piel de los radicales libres que producen las arrugas y el envejecimiento prematuro.
Queremos comenzar con una aclaración importante: hasta ahora no se ha demostrado de manera científica que algún alimento brinde al cuerpo humano sustancias que “disminuyan las arrugas”.
Es decir, la aparición de arrugas en el cuerpo humano obedece estrictamente a un ciclo natural y biológico que varía en cada uno de nosotros dependiendo de varios factores, como los hereditarios, el tipo de trabajo al que nos dediquemos, etc.
Pero especialmente se debe al estilo de vida que desarrollemos. Entre lo más importante que tenemos que destacar, está la alimentación y el tiempo que le dediquemos a nuestro cuerpo, bien sea ejercitándonos o haciendo algún tipo de actividad que aporte beneficios para equilibrar la mente, el cuerpo y el espíritu, como la meditación o el yoga, por ejemplo.
Alimentos que ayudan a reducir las arrugas
Este estudio realizado por la Clínica Mediestetic de Toledo explica que la posible relación entre la salud y la alimentación podría repercutir en la belleza de la piel. También expone que hoy se considera que la alimentación, además de un papel nutricional, podría tener un papel fundamental en la prevención de enfermedades crónicas y degenerativas.
Es decir, algunos alimentos podrían ayudar en el tratamiento y la prevención de recurrencias de algunas patologías cutáneas, como el acné y la psoriasis.
Continúa explicando que algunas modificaciones dietéticas pueden ser fundamentales en aquellas dermatosis ligadas a la obesidad y al envejecimiento cutáneo, aunque la mayoría de los estudios están realizados con muestras pequeñas y se recomiendan más para afianzar la evidencia científica.
Es decir, consumiendo determinados alimentos, podríamos ayudar a nuestro cuerpo a “envejecer de manera más lenta.” Entonces, vayamos a ver cuáles son algunos de estos.
Brócoli
El brócoli es conocido como un alimento energético que contiene vitamina C. Esta es crucial para la producción de colágeno, lo que podría ayudar a combatir las arrugas. También contiene betacaroteno, que podría ayudar a renovar las células de la piel.
Sobre esto último, puede citarse este estudio, cuyo título es “Belleza de la piel: el papel de los complementos nutricionales”. Aquí se explica que los suplementos de betacaroteno se están utilizando como fotoprotectores de la piel, solos o acompañados de vitaminas antioxidantes, aprovechando el efecto sinérgico entre ellos.
De igual forma continúan explicando que este pigmento abunda en las frutas y hortalizas de color anaranjado, bayas rojas y vegetales de color verde oscuro. Son suplementos que deben tomarse durante un período algo largo, puesto que su efectividad se ha demostrado en estudios de 8 a 12 semanas de duración.
Espinacas
Las espinacas contienen proteínas, fibra, hierro, potasio, folatos, vitamina C, A, E y betacarotenos. En el estudio titulado “Antioxidantes presentes en los alimentos: vitaminas, minerales y suplementos” se explica que la vitamina A sólo está presente en los alimentos de origen animal, mientras que en los vegetales se encuentra como provitamina A, en forma de carotenos.
Tal es el caso de la espinaca, es decir, ésta contiene vitamina A en forma de provitamina. La actividad antioxidante se centra concretamente en la inhibición de la peroxidación lipídica causada por los radicales libres. En palabras más simples: el consumo consciente de espinaca puede ayudar a mejorar el aspecto de la piel y a reducir la aparición de arrugas.
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Arándanos
En este estudio publicado por el Ministerio de Agricultura y Riego de la República del Perú se explica lo siguiente:
- Los arándanos tienen la capacidad antioxidante más alta de todas las frutas y vegetales que se consumen generalmente, con los flavonoides como principales antioxidantes presentes.
- Estos pueden ayudar a mejorar la función cerebral y a retrasar el declive relacionado con el envejecimiento.
La relación entre el consumo equilibrado de esta fruta y la disminución de arrugas es la misma que se puede observar en el comer brócoli. Es decir, ambos contienen antioxidantes, los cuales aportan a la piel beneficios para ayudar a reducir la aparición de arrugas.
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Aceite de oliva virgen extra
Un buen aceite de oliva virgen extra en crudo contiene una gran variedad de grasas saludables. Ayuda a reducir el estrés oxidativo en las células de la piel, ayudando a prevenir y reducir las arrugas existentes y eliminar las células muertas. La ingesta de aceite de oliva, frutas y verduras reduce los daños en la piel, hasta en un 25 %.
Esto puede ser consultado en este estudio en línea, publicado por los expertos de Dialnet, cuyo título es “Propiedades del aceite de oliva en el mantenimiento de la integridad cutánea”, que también explica sobre los aportes del consumo de aceite de oliva y como estos pueden ayudar a hidratar la piel así como a evitar la aparición de arrugas tempranas.
Nueces
Las nueces y muchos otros frutos secos son buenos para ayudar a sustituir grasas no saludables y de esta manera, prevenir la aparición de arrugas. Esto se debe a que contienen cobre y ayudan a estimular la producción de elastina. Esta se encarga de proporcionar elasticidad. Por tanto, sin ella, la piel se vuelve flácida.
Fuente: Henríquez, K. (2023, 9 julio). Los mejores alimentos para disminuir las arrugas. Mejor Con Salud. https://mejorconsalud.as.com/los-mejores-alimentos-para-disminuir-las-arrugas/
8 alimentos que favorecen la flexibilidad de tu cuerpo
Buena Vida
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández – 06/08/2017
¿Qué hay más importante que el bienestar de tu cuerpo? Acompañar estos alimentos de ciertos ejercicios mejorará sustancialmente la flexibilidad de tus músculos
El cultivo del cuerpo en Occidente ha seguido caminos sinuosos y cabría decir que incluso un tanto extremistas. La idea platónica de que el cuerpo es la cárcel del alma persistió, aun cuando en la Grecia antigua, incluso dentro de las ideas de Platón, el cuidado del cuerpo era un elemento imprescindible en la consecución del bienestar general. Más tarde la doctrina cristiana retomó en parte esa consideración negativa del cuerpo y lo miró más bien como vehículo de pecado y tentación, y entonces creó todo un aparato ideológico para mortificarlo. En tiempos más recientes el cuerpo se ha convertido en una mercancía propia de la sociedad del espectáculo en que vivimos, y entonces parece ser que el único propósito de cuidar de nuestro cuerpo es presumirlo en un estante de exhibición.
Sin embargo, existe un camino alternativo a todas esas posturas. Es posible e incluso necesario darnos cuenta de que la dualidad cuerpo/mente o cuerpo/espíritu es falsa y que uno no puede existir sin lo otro o, dicho de otro modo, que ambos son elementos inseparables de lo que somos. Nuestra identidad, por ejemplo, eso que pensamos cuando respondemos a la pregunta ‘¿Quién soy?’, la hemos elaborado con ayuda de nuestra razón, pero al mismo tiempo se ha formado a partir del cuerpo que tenemos y que nos ha acompañado a lo largo de nuestra vida.
En ese sentido, quizá sea momento de comprender que el cuidado del cuerpo no tiene por qué obedecer a otros fines más que nuestro propio bienestar. No es cierto que sólo cierto tipo de personas tengan “derecho” a cultivar su cuerpo (deportistas, modelos, actores, etc.), sino más bien podríamos empezar a considerar este asunto desde una perspectiva más integral, como si reuniéramos las piezas de lo que somos y que a veces se encuentran dispersas y, así, nos demos cuenta de que la salud, la felicidad, la plenitud, la satisfacción con nuestra vida, también implica cuidarnos físicamente.
Compartimos entonces esta lista de alimentos, los cuales recomendamos acompañar con rutinas cotidianas de ejercicios físicos que distiendan los músculos para flexibilizarlos (yoga, pilates, estiramientos, etcétera).
1. Fruta local de temporada
La fruta es una de las mejores fuentes de nutrimentos para nuestro cuerpo, con múltiples ventajas: suelen digerirse con facilidad, las vitaminas y azúcares que nos aportan son naturales y además su cultivo puede estar asociado a prácticas que no dañan el entorno. En este sentido, sugerimos consumir las frutas locales y de temporada que encuentres en el lugar donde vives, pues aquellas que proceden de lugares lejanos o que no son propiamente de la estación del año en que nos encontramos, usualmente están asociadas con prácticas agrícolas nocivas para el suelo e incluso para nuestra salud corporal.
2. Semillas de ajonjolí
El ajonjolí, también llamado sésamo, es uno de los ingredientes más usados en la cocina ayurvédica, donde se le considera una especie de tónico con beneficios para la piel, la virilidad y la fertilidad. Una de sus principales propiedades es que puede considerarse una gran fuente de calcio que, además, es fácilmente digerible. 1/4 de taza de semillas de ajonjolí crudas nos aporta 351mg de calcio, mientras que una taza de leche descremada aporta 316.3mg y una taza de leche entera 291mg. El calcio, como sabemos, es indispensable para la densidad de nuestros huesos
3. Jengibre
Tanto la cocina como la medicina tradicional de Oriente, en sus distintas culturas, comparten una alta estima por el jengibre. Del jengibre se conocen sus beneficios a la digestión, pero en el caso de la flexibilidad de los miembros es útil sobre todo por su cualidad de antiinflamatorio. Una taza de infusión de jengibre habitualmente, o su inclusión como ingrediente al cocinar, sin duda fortalecerá varios aspectos de nuestra salud.
4. Cúrcuma
La cúrcuma es una suerte de panacea para la tradición espiritual de Oriente. Entre los yoguis se le usa para distender músculos y ligamentos e incluso para curar ciertas heridas. Otros estudios han revelado que se trata de un poderoso antioxidante, es decir, un alimento que por su composición química y la reacción que provoca en nuestro cuerpo, es capaz de neutralizar los radicales libres que resultan de procesos fisiológicos naturales y que entorpecen la regeneración celular. El consumo de cúrcuma mejora la circulación sanguínea, con lo cual nuestros músculos pueden tener una mejor oxigenación.
5. Vegetales
Entre los numerosos beneficios de una dieta rica en vegetales se encuentra, en el caso específico de la flexibilidad muscular, el aporte de silicio que muchos de éstos proveen. El silicio es un componente químico indispensable en la construcción de tejido conjuntivo en sus distintos tipos: óseo, cartilaginoso, adiposo y otros; de ahí la importancia de incluir vegetales ricos en silicio si deseamos aumentar la flexibilidad de nuestro cuerpo. Espárragos, pepino, espinacas, coliflor, lechugas, alfalfa y otros vegetales de hojas verdes poseen silicio en abundancia.
6. Leguminosas
Las proteínas son la base química de nuestros músculos, y las leguminosas son una excelente fuente a la que podemos recurrir en nuestra dieta diaria. Frijoles, lentejas, habas y garbanzos son algunos ejemplos de leguminosas que te ayudarán a consolidar tu masa muscular. En este caso, además, tienen también a su favor que a diferencia de las carnes rojas, los lácteos o los pescados grasos (que también se consideran fuente de proteína), su digestión es mucho más fácil y sus niveles de grasa son menores. Los alimentos ricos en proteína tienen además la ventaja de que mitigan el hambre y dan la sensación de saciedad con mayor provecho que, por ejemplo, los carbohidratos, pues aun cuando éstos parece que nos sacian mejor, en el corto y mediano plazo nuestro cuerpo los convierte en reservas de energía (es decir, grasa corporal), sobre todo si nuestro desgaste físico diario es modesto o casi nulo.
7. Aguacate
Entre otros aportes que puede brindar a nuestro cuerpo, el aguacate se distingue por su nivel elevado de omega 3, un grupo de ácidos grasos que nuestro cuerpo no puede generar y por lo mismo obtiene de fuentes externas. El omega 3 es crucial para el desarrollo cerebral y la salud nerviosa, pero igualmente se ha demostrado su beneficio en la prevención de enfermedades cardiovasculares y otras como la arterioesclerosis. En cuanto a la flexibilidad muscular, el consumo de aguacate está relacionado con el efecto positivo que tiene sobre la circulación sanguínea.
8. Agua pura
Sabemos que el agua es indispensable para nuestro cuerpo, pero a veces no nos detenemos a preguntarnos por qué o hasta qué grado. En el caso del tejido muscular, baste decir que el 75% de su composición es agua, lo cual nos da una primera idea de por qué siempre necesitamos estar bien hidratados, y más aún si lo que buscamos es flexibilidad en nuestros músculos.
BONUS: Alimentos a evitar
Harinas y azúcares refinados, alcohol, carnes grasas: salvo que nuestra actividad física sea realmente elevada (digamos, la de un deportista de alto rendimiento); lo más recomendable es evitar este tipo de alimentos, que usualmente aportan más calorías de las que gastamos y, por lo mismo, hacen que nuestro cuerpo convierta el sobrante en reservas energética en forma de grasa, mismas que nos restan movilidad y flexibilidad. En la medida de lo posible reduce su consumo y, como decíamos, acompaña una dieta saludable de una rutina constante de ejercicio físico.
Fuente: Hernández, J. P. C. (s. f.). 8 alimentos que favorecen la flexibilidad de tu cuerpo. PIJAMASURF.COM. https://pijamasurf.com/2017/06/8_alimentos_que_favorecen_la_flexibilidad_de_tu_cuerpo/