La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha calificado los efectos de la DANA como «desastre humano sin precedentes» y ha pedido «paciencia» para valorar daños en el campo. Con la DANA aún activa, la organización agraria ha desaconsejado desplazarse a las fincas agrícolas a comprobar su estado y ha recordado que «no hay prisa» para trasladar los siniestros a Agroseguro.
La organización agraria cree que, como demuestra la ciencia, esta DANA tiene una relación directa con el cambio climático, que está comprobándose claramente en el campo en forma de mayor siniestralidad y nuevos riesgos. “El calentamiento global está poniendo en jaque al sistema de seguros agrarios español. Es obligación de todas las partes buscar soluciones”, ha remarcado.
A su juicio, «el seguro agrario pasa de ser una herramienta necesaria y voluntaria a una herramienta imprescindible. Debemos separar los daños normales de los extraordinarios consecuencia del cambio climático”.
UPA también cree que no deben ser los fondos “agrarios” los que respondan a este problema global que atenta contra la seguridad alimentaria. “La Unión Europea debe crear un fondo extraordinario para atender la nueva realidad del cambio climático”, ha añadido.
Según UPA, en la Comunidad Valenciana los daños serán cuantiosos, de momento en la provincia de Valencia, en espera de saber cómo evolucione la DANA en la provincia de Castellón. Previsiblemente, los mayores daños se concentren en el cultivo de los cítricos, pues las lluvias torrenciales han llegado en un momento crítico para la cosecha, que se generalizaría dentro de un mes aproximadamente. Hay muchas fincas anegadas que sufrirán asfixia radicular, por lo que los árboles sufrirán y pueden morir.
En Andalucía la DANA deja daños considerables en cultivos e infraestructuras agrarias, principalmente en caminos rurales y regadíos, pero también beneficios para ciertos cultivos. Las provincias más afectadas han sido Almería, Málaga, Granada y Cádiz, mientras que los olivares de Jaén y Córdoba, además de los pantanos, tanto de la Cuenca del Guadalquivir como de la Cuenca Mediterránea, han tenido considerables aportes de agua.
UPA ha precisado que la parte occidental de Andalucía ha sido la más afectada por el temporal. En Cádiz, Jerez de la Frontera ha registrado los mayores daños, con hasta 120 litros de agua en 12 horas. En Málaga se cuantifican incontables daños en gran cantidad de cultivos y numerosas infraestructuras agrarias, sobre todo en el Valle del Guadalhorce, Antequera y la Axarquía. Los daños se extienden a superficies de cultivo, equipos técnicos, estructuras de riego, muros, vallas y maquinaria agrícola, dejando pérdidas significativas para los agricultores y ganaderos. El cultivo más afectado es el de los cítricos. Las últimas lluvias complican también la recién comenzada campaña de la aceituna. Sin embargo, en la Sierra Norte de Sevilla y en provincias como Córdoba, Jaén, Huelva y Granada, las lluvias han sido más beneficiosas.
En concreto, en Almería precisa que el balance en la comarca del Poniente almeriense es dantesco. La tormenta de granizo, con abundancia de lluvia y viento, ha causado cuantiosos daños, tanto en los invernaderos como en los cultivos. En una primera evaluación, más de 30 millones de euros de pérdidas sufridas por los agricultores, sobre todo en El Ejido, en una franja de siete kilómetros, con rotura total de los plásticos de los invernaderos y los cultivos que están dentro. El destrozo fue importante a causa del tamaño de los granizos, de unos 8 centímetros de diámetro, lo que hizo que el plástico que cubre el invernadero se rompiera por completo y destruyera la estructura entera, lo que causó a su vez rotura de las plantas de tomates y pimientos, aunque también se han visto afectados el calabacín y el pepino. Se han visto afectadas 11.300 hectáreas.
En la provincia de Málaga se han visto afectados cítricos y viñedos, así como infraestructuras agrícolas, sobre todo caminos rurales y regadíos. Hay daños en superficies de cultivo, sobre todo en las zonas del Guadalhorce, Axarquía y Antequera, así como estructuras de riego, maquinaria arícola e infraestructuras rurales. En el resto de la provincia se han producido daños por arrastre de tierras, pero no por inundaciones. La DANA deja un panorama de pérdidas significativas para los agricultores, que aún se están cuantificando. No obstante, estas precipitaciones han venido muy bien para el campo y, especialmente, para los pantanos, que han visto incrementar sus aportaciones de agua en casos, como en de La Viñuela, muy preocupantes, según UPA.
En la provincia de Cádiz las principales afecciones se han producido en la campiña de Jerez de la Frontera, con parcelas totalmente inundadas. También se han ocasionado daños en cultivos, como algodón (aunque una buena parte de la cosecha tardía ya estaba afectada por la earia) y almendros, así como en infraestructuras agrícolas. En la zona de Villamartín, a un agricultor se le inundó parte del olivar y el agua le entró en la nave. Asimismo, el cultivo del boniato, por estar en zonas no arenosas, se perderá casi por completo. En la provincia se han recogido más de 100 litros de agua de media.
Los arroceros de Sevilla son los más afectados por estar en plena recolección. Se ha producido la pérdida de una buena parte de la producción, ya que se encontraba la espiga seca y lista para cosechar, pero estas lluvias han impedido su recolección. El viento y las inundaciones también están causando estragos en el cultivo, ya que debido a la gran cantidad de agua que ha caído será imposible entrar a recolectar en el corto plazo de tiempo. Además, el viento está tumbando las plantas que, al quedarse por debajo de la superficie del agua, se mojan y mueren por asfixia. La presa de Alcalá del Río ha recogido la mayor parte de las precipitaciones de la provincia, cuyas comarcas de la Sierra Norte y la Campiña han sido las más afectadas por la DANA, pero han sido lluvias más beneficiosas para el campo y la ganadería que perjudiciales, según UPA.
En la provincia granadina ha llovido bastante, pero ha sido un agua muy beneficiosa para el campo; mientras que en Córdoba, que se han recogido unos 30 litros de media, el agua ha sido muy beneficiosa para el olivar. Ya se han acumulado en octubre, según la organización, 170 litros de agua.
La DANA ha dejado en la provincia de Jaén una lluvia acumulada de más de 120 litros por metro cuadrado. En el conjunto del mes de octubre se llevan recogidos 134 litros. Cazorla ha sido uno de los municipios más lluviosos, con 88 litros. En Siles las precipitaciones han superado los 75 litros y 70 en Torres. También en Cambil y en La Guardia han caído 65 litros. A su juicio, se trata de una lluvia muy beneficiosa para el olivar, aunque haya paralizado durante unos días la campaña de recolección.
En Castilla-La Mancha la DANA ha dejado unos efectos tremendamente desiguales en función de las zonas. Más allá de daños en caminos rurales y ciertas infraestructuras, UPA ha precisado que, en términos generales, el agua caída en la región ha sido beneficiosa para el campo.