Casi como si se tratase de un manual, antes de sentarse en sus butacas a disfrutar de una película en el cine, la mayoría de los espectadores tiene una regla de oro: comprar palomitas. Pero, ¿por qué se despierta el apetito de manera intensa mientras vemos una película?
El fenómeno de sentir hambre mientras disfrutamos de una película en la pantalla grande tiene mucho que ver con el entorno en el que comemos. Destaca que la disminución de la iluminación nos induce a estar más relajados, y en ese estado tendemos a consumir más porque la preocupación por la cantidad de comida que ingerimos se desvanece, no le prestamos atención
También, hay estudios que demuestran que, en ambientes con poca luz, las personas tienden a optar por comidas más ‘indulgentes’ en lugar de saludables. Esta tendencia se amplifica en el cine, donde la distracción con la trama en pantalla juega un papel adicional. Es aquí donde las palomitas de maíz, un snack poco atractivo en otros lugares, se convierten en un capricho reconfortante. Del que siempre queremos más.
En un estudio, se descubrió que en condiciones de poca luz, los alimentos con un único matiz de sabor, como dulce o salado, saben mejor que cuando están iluminados. Además, una temperatura baja consigue que queramos comer más, puesto que el frío consume nuestras reservas de energía y hace que el cerebro envíe señales en busca de más calorías.
Finalmente, otro aspecto que puede influir, tal y como dijo profesora de estudios de comunicación en la Universidad Bautista de Hong Kong «Las acciones de los personajes de las películas, particularmente cuando están comiendo, crean patrones en la forma en que come la audiencia». (Se trata de un efecto de imitación.)
El texto me parece muy acertado y fácil de entender. Me gusta cómo conecta el ambiente del cine, como la luz baja y el frío, con el hecho de que comamos más. Además, es interesante pensar que ver a los personajes comiendo también nos afecta. En general, creo que el texto describe bien por qué las palomitas se vuelven tan deseadas cuando estamos viendo una película.
Es muy curioso como el ambiente en el que nos encontramos determina nuestro apetito y que tipo de alimento preferimos; en este caso con un único matiz de sabor. Pero, ¿porque las palomitas y no otro alimento?
Estoy de acuerdo con esta noticia, creo que el cine nos hace perder la noción del tiempo. También es verdad que al estar en un lugar oscuro y estar pendiente de la película, no te das ni cuenta de lo que estás comiendo ni de la cantidad, y eso considero que puede ser algo negativo.